Un fin de semana redondo

Primero fue lo de Almería. Ocho sin el siete, pues sólo faltó el gol de Villa que, una vez más, queda disculpado por ofrecerse a asistente de lujo de Messi. Sobran las palabras. El Barça volvió a encontrarse fuera como en casa y salió apabullando al rival, encerrándolo hasta la resignación. Esta vez, felizmente la efectividad fue superior a la acostumbrada, y en pocos minutos cayeron no uno, sino dos. El autogol de Acasiete acabó con el partido, pero no con el Barça, que quería seguir jugando su fútbol a tope, aunque sólo fuese por no entumecerse, con tantos minutos por delante. Así cayeron 5 en poco más de media hora. Para flipar. Y al final, récord histórico de goleada a domicilio, que iguala la de la 59/60 a Las Palmas. El Sport ha sacado a propósito un magnífico reportaje de las mejores goleadas culés.



Luego vino lo del Xerez. La irregularidad del equipo ayer se manifestó dentro de un mismo partido, en el que el equipo mostró dos versiones completamente distintas. Una primera parte de las malas, donde lo más positivo fue el solecito que daba en las primeras filas, y una segunda mitad completamente diferente, en la que llegó la pegada y, con los goles, algo de toque en el centro del campo. Pese a todo, la elaboración coordinada del juego sigue siendo un simple anhelo. El estado de Josemari es sorprendente. Ayer él sólo se montó una película alternativa a la mediocridad que proponían Xerez y Valladolid sobre el campo. Hizo tres goles y puso el otro. Una actuación individual tan destacada que bien mereció los vítores ('Zemaaari') y cánticos que pedían su inmediata incorporación a la Selección.



Y en medio, la II Carrera Popular Garvey. Ayer corrí pa algo por primera vez. Quiero decir, fue mi primera carrera popular (10 km.). Magnífica experiencia y sensaciones de lujo, después de la incertidumbre y los nervios que llevaba. Ya incorporaré alguna foto, que ahora mismo no puedo.

Así que, fin de semana redondo en lo deportivo: tanto desde el sofá como por las calles del centro de Jerez por las que corrí.